El desarrollo de producto paso a paso (4)

A lo largo de esta serie, hemos querido acompañarte desde la generación de ideas de negocio, profundizando en cómo realizar la investigación de mercado y producto, y, a continuación, en cómo entrar de pleno en la fase de la creación de prototipos.

 Llegados a este punto, ya tenemos más que claro qué es lo que vamos a vender, a quién, cómo e, incluso, tenemos una proyección de cómo debería funcionar en cuanto a ventas… pero aún no tenemos el producto en sí mismo.

 ¡Este es el momento de ponernos en serio con la producción!

Volvamos al final del último artículo de la serie hasta el momento. Para entonces ya habremos creado una versión muy fiel a la que se va a comercializar, ese prototipo ya evolucionado e iterado con el resultado de los correspondientes tests. Por lo tanto, esa es la referencia que vamos a utilizar como molde para la producción masiva.

 Ahora es el momento de comenzar a asegurarte el suministro de los materiales necesarios para crear el producto y negociar con los proveedores (tanto de bienes como de servicios), necesarios para poner en marcha la cadena de suministro.

 Entiendo que estarás impaciente por comenzar a fabricar, pero el mejor consejo que te podemos dar es que tengas un poco más de paciencia. No es cuestión de quedarse con el primer proveedor que te garantice los mínimos exigidos en calidad, tiempos de entrega, logística o precio… necesitas contrastar varios presupuestos.

Si no lo has hecho antes, probablemente sea al enfrentarte a la fase de abastecimiento del desarrollo de producto cuando te plantees si merece la pena fabricar o, por el contrario, tendría más sentido buscar un proveedor que venda B2B en tu caso concreto.

Las principales ventajas de crear tu producto desde cero son:

•  Personalización máxima: nadie va a tener el mismo producto exacto (a no ser que lo copie y, entre otras cosas, ahí interviene la ley de propiedad industrial e intelectual).
• Ajuste a las necesidades de tus clientes al milímetro.
• Control sobre el producto final y su calidad.

Por el contrario, si apuestas por fabricantes que ya estén establecidos y tengan un producto similar al tuyo, las ventajas principales son:

•  Va a ser más fácil encontrar disponibilidad en el mercado.
• Puedes empezar a vender casi inmediatamente.
• Probablemente encuentres más proveedores que sirvan el mismo producto, con lo que tienes ese margen de negociación.

 Pero claro, si optas por esta segunda opción lo harás a sabiendas de estar comercializando un producto que no tiene la misma exclusividad que si lo hicieras ad hoc. Aunque siempre puedes intervenir sobre él añadiendo algún valor extra, modificando el packaging, creando bundles...

 Es cuestión de valorar los pros y contras de cada estrategia.

Para aquellos que busquen gente que pueda producir sus diseños, siempre tendremos Internet. Existen múltiples directorios para prácticamente cualquier nicho. No te costará más de un par de clicks hacerte con unas cuantas de estas páginas.

 También puedes acudir a ferias sectoriales presenciales. Puede sonar un tanto anticuado, pero siempre se negocia mejor cara a cara (y puedes curiosear mejor sobre la calidad de sus productos, procesos y técnicas).

 Otra opción –y esta vale también para los que adquieran productos finalizados al por mayor–, es acudir a marketplaces mayoristas como AliBaba o MSME. La diferencia es que unos lo utilizarán para obtener el nombre (y la dirección de contacto) de los fabricantes en China o India, mientras que los otros comprarán a estos proveedores directamente.

Pues con esto hemos llegado al final de esta guía de desarrollo de producto paso a paso. Ya solo nos quedaría hacer números para saber qué coste va a tener nuestro negocio y lanzarse a la parte de la comercialización.

 Para esa parte relacionada con el marketing y la creación de tiendas online, puedes encontrar muchísima información en este mismo blog. Es el momento de comenzar a vender.

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