Cómo monetizar tu blog y convertirlo en un negocio

Bueno, si miras alrededor de este texto te darás de bruces con uno.

Básicamente se trata de un sitio web en el que se publica con cierta regularidad contenido que tiene una temática determinada.

Es importante dividir los blogs en dos grandes tipos más allá del tipo de contenido, que es casi infinito porque hay blogs de prácticamente cualquier tema.

Me estoy refiriendo a:

• Blogs corporativos: se trata de una herramienta más al servicio de la marca. Su monetización va estrechamente vinculada a la de la empresa y no suele ser una unidad de negocio independiente.
  

• Blogs personales: pueden tener una intención de rentabilización desde un principio, aunque no siempre es así. En muchos casos los blogs personales nacen de un interés por un determinado tema. Y es cuando generan cierto tráfico cuando se perciben como una oportunidad de negocio.
  

Además de estas dos tipologías, podríamos incluir una tercera que sería un híbrido de ambas: los blogs de marca personal.

Me explico: sería fácil pensar que, si te gusta el ciclismo, podrías abrir un blog  sobre ciclismo y ya. Bueno, pues antes tienes que hacer un cierto trabajo de categorización. ¿Dónde está el negocio? ¿Qué nichos son interesantes?

Utiliza herramientas para ayudarte a hacerlo, algunas gratuitas como Google Trends son de mucha ayuda.

Haz un buen listado y consulta el tráfico que generan al mes para saber a qué publico potencial puedes llegar. Para esta tarea puedes usar la herramienta de palabras clave de Google o una herramienta de pago como SemRush.

Aquí no me extenderé demasiado, sólo decir que hay dos tipos de blogs:

• Auto-alojados: tienen un coste adicional ya que tienes que pagar por el hosting y el dominio, pero son mucho más configurables y dan un aspecto más profesional.

• Alojados: tienen la ventaja de ser gratis pero, lógicamente, son mucho más limitados.
  

Si el blog está integrado en una estrategia corporativa, es posible que tu plataforma de eCommerce ya cuente con la opción de incluir uno sin romperte la cabeza con herramientas de terceros.

Un blog es poco más que contenido, así que tienes que asegurarte de estar generándolo de manera consistente. Olvídate en un principio de hacer dinero, primero ofrece algo:

• Interesante: para algo has hecho la investigación de temas.
• Exhaustivo: no te quedes en 200 palabras y una foto.
• Contextual: si hablas de ciclismo, no metas un post de F1. Por muy profundo e interesante que resulte, no está alineado con tu temática.

Te recomiendo también que generes un calendario editorial para que sepas qué y cuándo publicar. Busca:

• La estacionalidad de tu público (post sobre ciclismo de carretera cuando empiece el Tour de Francia).
• La estacionalidad de mercado (bicicletas para niños en Navidad).
• Contenido evergreen que sirva siempre (dieta para ciclistas, recuperación de lesiones).